La escala. Ese número tramposo que muchas veces parece más un rumor de pasillo que una medida real. Uno observa que todo es tan sencillo como 1:6, 1:12, o «escala 7 pulgadas», y después llega McFarlane, te pone una figura de Superman al lado de una de Spawn, ambas del mismo año, y ya no sabes si estás midiendo altura, proporción o puro capricho del moldeador jefe. Pero para entender en qué escala juegan —literalmente— las figuras de McFarlane Toys, primero hay que aceptar que la palabra escala en esta casa no siempre ha significado lo mismo… y que eso ha sido parte de su encanto, su problema y su identidad.

Durante años, McFarlane se movió con la misma lógica que un director de videoclip: que se vea espectacular, aunque no encaje con nada más. Las figuras no estaban pensadas para cruzarse entre líneas, ni para jugar bonito con otras marcas. Estaban hechas para quedarse quietas, posar con dramatismo y parecer una estatua si las mirabas con mala luz. En los 90, cuando la línea de Spawn explotó entre vitrinas y catálogos, eso era suficiente. Nadie hablaba de “escala compatible” porque nadie esperaba que tu Spawn compartiera vitrina con una Marvel Legends. Ni existía esa posibilidad. Las líneas eran islas.

La mayoría de las figuras McFarlane clásicas —hablamos del periodo 1994 a 2006— se movían en un terreno ambiguo que, técnicamente, se acercaba a una escala 1:10 o lo que llamaríamos figuras de 6.5 a 7 pulgadas. Pero ojo, decir «1:10» aquí es como usar un mapa de metro para caminar por una ciudad que no conoces: te ubica más o menos, pero no esperes precisión quirúrgica. Los personajes musculados, con poses encorvadas y accesorios sobredimensionados hacían que cada figura pareciera tener su propia lógica de escala. Y así fue como muchos coleccionistas acabaron teniendo estanterías en las que los personajes parecían de distintos planetas, aunque salieran del mismo blister.

Lo que aprendés rápido en comunidades como r/McFarlaneFigures es que llamar a las piezas “1/12” no encierra bien el panorama. El consenso suele apuntar a que es más acertado hablar de una escala cercana al 1/10, aunque no sea una regla invariable. Cuando un coleccionista mide una figura McFarlane de unos 7 a 7.5 pulgadas (17‑19 cm), automáticamente cae en cuentas: si representa a un humano de seis pies (~183 cm), la escala queda en torno a 1/10.

McFarlane varía sus escalas (a menudo)

McFarlane Toys Marvel Comics 1/10th & 1/16th Figures Pre-Orders - YouTube

Y quizás te preguntes: ¿McFarlane taggea todas sus figuras como 1/10 o hay mezcla? En las deluxe box sets, por ejemplo, se mantienen las figuras de 6 pulgadas (1/12) junto con accesorios a escala. Entonces no todo es grandes proporciones: hay coexistencia de dos estándares dentro de la marca.

Las cifras no están grabadas en piedra. McFarlane nunca ha seguido un estándar rígido: el torso de un Batman Rebirth puede ser 1/11, los brazos 1/12 y las piernas 1/10. Eso explica por qué dos figuras etiquetadas como “7‑inch” pueden tener proporciones distintas entre sí, según molde y versión.

La línea DC Multiverse fue el punto de quiebre. Durante la etapa de Mattel eran seis pulgadas, con articulación tipo Collect & Connect y proporciones maduras. Al pasar a McFarlane en 2020, esas mismas figuras crecieron a siete pulgadas y 22 puntos de articulación, consolidando la conversión al 1/10 aprox. Esa decisión tenía su trasfondo: Todd McFarlane reconocía que los coleccionistas habían madurado desde los 5‑inch originales, y querían algo más contundente en mano y presencia.

McFarlane Toys Marvel 1/10 Scale Figures - The Toyark - News

Para alguien que trabaja con cabezas impresas en 3D o busca compatibilidad de partes, esta inconsistencia escala‑proporción es clave. Muchos creadores custom aceptan que no existe una fórmula universal: perfectas pruebas, réplicas físicas, fotos con cinta métrica o referencia de objetos comunes son prácticas habituales. De hecho, algunos usan cabezas de 1/12 en cuerpos McFarlane y el resultado sale extrañamente desproporcionado.

Si estás viendo el empaque y dice “7‑inch scale figure”, implicaría que es parte de la era McFarlane post‑2020, acercándose al 1/10 real. Pero hay excepciones: las deluxe box sets incluyen figuras de seis pulgadas claramente 1/12, acompañadas de accesorios a escala. Ahí conviven dos estándares: uno menor (1/12), otro mayor.

Años atrás, en 2008, anunciaron figuras de Guitar Hero de ¡6 inches!, con 15‑18 puntos de articulación. Aunque suene un anacronismo comparado con la DC Multiverse, esas piezas jugaban en la liga del 1/12 clásico, antes de la expansión a siete pulgadas.

Actualizaciones de escalas en McFarlane Toys desde los 2000’s

McFarlane Toys Marvel Collection Posed Figure Statues SPIDER MAN & DEADPOOL  Review - YouTube

Ahora bien, todo cambió —otra vez— en 2020, cuando McFarlane Toys obtuvo la licencia de DC Multiverse. Fue como si Todd se levantara una mañana y decidiera entrar al ring de los “juguetes de acción posables” con reglas más claras. La línea nueva vino con promesas de articulación moderna, más compatibilidad de escala y una orientación hacia el estándar de las 7 pulgadas. Pero incluso aquí, esa escala de 7” tiene matices. En teoría, la línea DC Multiverse 2020+ opera bajo una escala uniforme de 7 pulgadas… pero no es lo mismo un Batman de 7″ que un Superman de 7″ si uno tiene las piernas más largas y otro un torso de armario empotrado.

Y entonces surge la otra pregunta que todo el mundo se hace después de preguntar la escala:
¿Por qué McFarlane no hace figuras en 6 pulgadas como Marvel Legends o Star Wars Black Series?
La respuesta es tan práctica como estética: porque Todd siempre fue más escultor que juguetero. A él le gusta la presencia. La pose. El detalle. Y eso, según su equipo, se logra mejor en una figura más alta. Hay más superficie para texturizar, más espacio para inyectar dramatismo. Menos compromiso con lo “jugable” y más foco en lo “exhibible”. Es su filosofía desde los días de las Movie Maniacs.

Do these McFarlane figures scale well together for a Justice League lineup?  : r/McFarlaneFigures

Sin embargo, eso ha generado un desfase eterno entre marcas. Las figuras de McFarlane Toys actuales no son compatibles en altura con líneas 1:12 (como Marvel Legends o Mafex), aunque muchas veces parecen estar cerca. Un Batman de McFarlane se verá algo desproporcionado si lo pones al lado de un Capitán América de Hasbro, incluso si la diferencia es de apenas media pulgada. ¿Por qué? Porque no solo cambia la altura, cambia la proporción general del cuerpo: manos más grandes, torsos más largos, pies más pesados. Son figuras que parecen pensadas para existir solas, no en un crossover.

Claro, hay excepciones y momentos raros. Algunas figuras de personajes más bajos (como Damian Wayne) encajan visualmente mejor con líneas de 6″, mientras otras, como Doomsday o Bane, rompen con cualquier estándar directamente por su tamaño bestial. Y ese es otro punto: McFarlane ha usado muy bien la excusa del tamaño del personaje para justificar los Megafigs, que no tienen una escala formal sino una presencia. Clayface no es de 10 pulgadas porque alguien calculó su tamaño respecto a Batman. Es de 10 pulgadas porque así impresiona más.

Otro dato interesante es cómo McFarlane ha evitado las escalas intermedias o de bolsillo, salvo por algunas líneas accesorias o figuras estáticas. Mientras otras marcas lanzan líneas “retro” de 3.75″, Todd se mantiene en su carril de los 7″, sin interés por volver a escalas menores. Lo suyo no es el “verso expandido”, es el monólogo. Una línea, una escala, su estilo.

¿Entonces qué escala tienen los McFarlane Toys?

McFarlane Toys DC Multiverse BATMAN [Choose] 7" Inch Scale Action Figure

La respuesta más directa sería: 7 pulgadas (aproximadamente 1:10), con ligeras variaciones dependiendo del personaje.
Pero si vas a ponerte técnico y medirlo con reglas de modelismo, más vale que te prepares para frustrarte. Porque aquí, más que escala, lo que importa es la intención estética detrás de cada línea.

Y si sigues preguntándote por qué esa figura de Batman no encaja bien con tu Spider-Man de Legends, la culpa no es tuya. Es que estás tratando de juntar dos filosofías distintas: una hecha para jugar en equipo, la otra hecha para sobresalir en solitario. respuesta fluye del tacto y la mirada compartida. Una colección coherente casi siempre trata de agrupar figuras semejantes en tamaño. Mezclar 1/12 y 1/10 puede desequilibrar la presencia estética; las cabezas, proporciones y accesorios se sienten fuera de lugar. Coleccionistas aficionados a repaint o custom saben que una cabeza diseñada para una figura 1/12 puede emerger demasiado pequeña si la montás en un cuerpo de 7 pulgadas – o viceversa.

Como pasa en muchas vitrinas modernas: hay figuras que no están hechas para combinar, sino para ocupar su propio estante como si fueran portada. Y si algo ha hecho McFarlane Toys desde los noventa, es recordarnos que a veces eso es más que suficiente y debemos dejar de lado el perfeccionismo por las medidas áureas. Ni que fueran estatuas de la Antigua Grecia.